¿Recuerdas al León Cobarde del Mago de Oz? Me encanta la forma en que se acaricia la cola para calmar los nervios. Recuerdo cómo los temblores se apoderaban de él cuando se ocultaba detrás de Dorothy. Pero lo más importante, recuerdo haberlo visto convertirse en el León Valiente.
Al igual que el león en El Mago de Oz, nos enfrentamos a la elección de mostrarnos como el líder valiente o el cobarde.
Recientemente una colega a la que aprecio mucho y a quien había lastimado profundamente con algunas de mis expresiones me llamó la atención. Al principio, la líder cobarde que hay en mí se sintió avergonzada por mis expresiones, pero afortunadamente la líder valiente se hizo cargo rápidamente y en la primera oportunidad que tuve me disculpé con ella públicamente. También le pregunté si estaba dispuesta a tener una conversación conmigo para poder comprender mejor el impacto de mis palabras y asumir mi responsabilidad por ellas. Me di cuenta de lo descuidadas que fui, tomando en cuenta mi posición como líder en la organización. Oprah Winfrey dice: “Hace mucho tiempo aprendí que de mí, cada susurro se convierte en un grito”. Todavía estoy aprendiendo esto. Estoy feliz de decir que hoy la relación entre mi colega y yo se ha restaurado y es más fuerte que nunca. Sin embargo, nada de esto habría sucedido si ella no hubiera tenido el coraje de hablar con la verdad.
A menudo como líderes, cuanto más alto nos ubicamos en un organigrama, menos retroalimentación honesta recibimos. Robert S. Kaplan de la Escuela de Negocios de Harvard lo describe de esta manera: “A medida que los ejecutivos adquieren más experiencia, es menos probable que reciban retroalimentación constructiva y estratégica”. El hecho de que los líderes con mayor autoridad reciban una retroalimentación menos honesta puede ser peligroso. Entonces, como líderes, debemos alentar y recompensar el hablar con la verdad si queremos llegar a soluciones concretas.
Una forma en que recompensamos el hablar con la verdad es afrontándola valientemente. Los líderes cobardes se hacen los desatendidos e incumplen con su labor de líder al hacerse de la vista larga o hacerse los ofendidos. Los líderes valientes, por el contrario, afrontan el problema reconociendo el impacto de hablar con la verdad, captándolo y atesorándolo.
Robert Cialdini, en su libro ‘Influencia’ explica que las personas requieren presión social para actuar con valentía. Él cuenta la historia de Kitty Genovese, quien fue apuñalada hasta la muerte en un vecindario de la ciudad de Nueva York en 1964 mientras 38 vecinos observaban desde el interior de sus casas. Todos esperaban que alguien más actuara con coraje e interviniera pero nadie lo hizo.
Como líderes debemos dar el ejemplo y recibir comentarios y/o críticas con valentía. Necesitamos incentivar la honestidad, responder bien cuando la recibimos y ser agradecidos. Al hacer esto aumentamos la presión social de hablar con la verdad en todo momento.
En un día cualquiera, todos podemos encontrarnos respondiendo tanto como el líder cobarde así como el valiente. ¿No sería genial si pudiéramos deshacernos de nuestros “temblores” y mostrarnos como el líder valiente en todo momento?
Autora: Denise Padín Collazo
Denise Padín Collazo es una líder de justicia social, mentora de mujeres de color e integradora del trabajo familiar. Es autora de Thriving in the Fight: A Survival Manual for Latinas on the Front Lines of Change (Berrett-Koehler, 2021). Su trabajo ha aparecido en Miami Herald, Telemundo, Chronicle of Philanthropy y Nonprofit Quarterly. Twitter @DeniseThriving